Más de un año después del inicio de la pandemia de la COVID-19, muchas personas en todo el mundo siguen viéndose amenazadas en su vida sin acceso adecuado a servicios médicos, y enfrentan dificultades económicas debido a la pérdida de empleo.
En medio de esta situación, Perú implementó un estricto confinamiento social durante el 2020 y la primera mitad del 2021. Sin embargo, debido al efecto de las celebraciones de fin de año y la aparición de la variante brasileña del virus, el país ha estado registrando cifras récord de nuevos contagios a diario, librando una guerra interminable contra el virus.
Ante esta situación, el 18 de febrero, los miembros de ASEZ en el Perú llevaron a cabo una labor de desinfección en Eulogio, La Soledad, ciudad de Huaraz, con el fin de prevenir la propagación de la COVID-19.
Los miembros ya habían realizado previamente cuatro jornadas de desinfección en Huaraz, abarcando más de 1600 hogares. Durante la actividad, desinfectaron edificios del vecindario, puertas y ventanas de casas, aceras y postes. El desinfectante utilizado en la jornada estaba aprobado por el Ministerio de Salud, capaz de eliminar todo tipo de virus y bacterias, y su efecto tiene una duración de hasta 72 horas.
Los miembros de ASEZ en el Perú continuarán realizando actividades de servicio voluntario con el corazón de una madre que no escatima sacrificios por sus hijos, especialmente en tiempos difíciles. Hasta el día en que se recupere la paz en la vida cotidiana, se espera que las actividades de los miembros de ASEZ sigan brindando esperanza y valor a la comunidad local.